sábado, 14 de febrero de 2015

CARROT CAKE (PASTEL DE ZANAHORIA)

Hace un par de años tuve la oportunidad, de pasar unos días en Nueva York y me pareció una ciudad impresionante, en todos los sentidos. Por descontado probé su comida con desigual resultado, en ocasiones me sorprendió para bien y en otras, bueno, fue pasable, de todas formas tengo que confesar que comí pocas cosas dulces, la tarta que os propongo hoy no llegue a comerla allí. A pesar de todo, el hecho de hacer un dulce típicamente NY, ha servido para recordar ese viaje, que si no fuera por la distancia y el dinero, repetiría sin dudarlo. Así quiero hacer con esta entrada mi pequeño y humilde homenaje a NY.
De la tarta de zanahorias destacar su suavidad y su agradable sabor especiado, acompañado de ese glaseado de queso que se funde con el bizcocho en la boca y para mí la hace una de las cosas más buenas que yo he tomado como acompañamiento de un café.


INGREDIENTES:

PREPARACIÓN LIQUIDA:
130 g de azúcar moreno (o 120 g de azúcar en polvo más 10 g de melaza)
12 cl de aceite de girasol
4 huevos medianos
2 cucharadas soperas de zumo de naranja
Ralladura de una naranja
1 cucharadita de café de extracto de vainilla


INGREDIENTES SECOS
240 g de harina
2 cucharaditas de café de levadura química
3 pizcas de sal
2 cucharaditas de café de canela en polvo
4 pizcas de nuez moscada rallada
4 pizcas de cardamomo en polvo
4 pizcas de pimienta negra molida fina

ZANAHORIAS Y FRUTOS SECOS:
240 g de zanahorias ralladas
2 grandes cucharadas de nueces picadas
2 grandes cucharadas de pasas


GLASEADO
100 g de mantequilla blanda
200 g de queso para untar natural (con un 25% de materias grasas, tipo Philadelphia)
100 g de azúcar glas
100 g de coco rallado (a tu gusto, yo en esta ocasión no lo he puesto)

LA PASTA:
Precalentar el horno a 18ºC. Batir  enérgicamente los ingredientes de la preparación liquida. Mezclar los ingredientes secos y añadirlos a la preparación anterior, sin trabajar demasiado la pasta. Por último, añadir las zanahorias y los frutos secos. Engrasar y enharinar un molde redondo de 22 centímetros de diámetro. Llenar el molde hasta sus tres cuartas partes cono la pasta.

LA COCCIÓN:
Hornear durante unos 40 minutos. Dejar enfriar.


EL GLASEADO:
Batir la mantequilla, el queso y el azúcar en un robot provisto de  la cuchilla en forma de S o mezclar los ingredientes con el tenedor hasta obtener una mezcla lisa y homogénea. Extender el glaseado sobre el pastel con ayuda de una espátula, si no se dispone de ella con un cuchillo.
Espolvorear con coco rallado, si se quiere.
Espero que esta tarta sirva para compartir algún momento especial, con alguien también especial, que es lo que más nos gusta a los reposteros caseros.


Un beso para todos.
Hasta pronto.


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